martes, 21 de abril de 2009

De mi existencia

Esta parte del camino se está haciendo particularmente lenta.
Hace ya varios días que la sensación de silencio se hace presente en mi. Es un silencio expectante, de expectativa. No llega a ser tensión o ansiedad. Es una sensacion de estar transitando un momento previo. De ser la antesala a un momento por venir. A veces, mi pensar se entromete en la sensación de silencio, pero como un velo que luego cae lentamente, emerge esa espera silenciosa otra vez. Y es solo eso... espera silenciosa.
Ahora se me aparecen las palabras de un hexagrama del IChing: -Antes de la Consumación-.
Me estoy dando cuenta que mi momento existencial esta definido en esas palabras.
Estoy siendo el momento previo a la Consumación
Gustavo.

Del perdón

"Nunca se dirá suficientemente que no es natural perdonar. Un perdón fácil tiene pocas posibilidades de ser auténtico", escribio Litta Basset, profesora de teología y pastora.
Perdonar no significa obligatoriamente reconciliarse. Se puede perdonar sin volver a relacionarse con el que ha ofendido.

Perdonar es detener el sufrimiento ocasionado por el rencor, deponer esa energía negativa implicada en el deseo de revancha, la animosidad, el resentimiento o el odio. Ese estado de ánimo nos libera y devuelve al otro la energía negativa que guardamos dentro de nosotros.
Perdonar no significa olvidar
, ya que conservamos los aprendizajes que otorga la experiencia. [...]

Según el norteamericano Robert McDonald, uno de los principales representantes actuales de la PNL, el perdón consiste en relajarse frente a la exigencia de que el pasado sea diferente a como ha sido. Eso no significa aprobar el comportamiento inaceptable del otro. Se puede perdonar y recordar. Entonces, en lugar de estar entrampados en el daño provocado, quedamos liberados del pasado. Para McDonald, si uno está lleno de odio, no puede tener una vida feliz. Agrega que el perdón exige mucho tiempo y trabajo. Su fin último es la paz del espíritu.
Perdonar también es renunciar a toda "exigencia de pedido de disculpas" por el mal que nos hicieron o la injusticia que sufrimos.
En psicodrama, el juego de roles permite alcanzar la capacidad de perdonar, de igual modo que en la PNL se utiliza el "protocolo del perdón". Imaginamos que tendemos respetuosamente un anzuelo que teníamos en el corazón a la persona por la que sentimos rencor o enojo. Y entonces decimos: "Toma, es tuyo, no lo quiero mas. Te lo doy. Ahora estoy libre".
Frecuentemente, se trata de perdonarse a uno mismo por no haber podido impedir la pérdida, por no haber podido cambiar el curso de los acontecimientos.
Extracto del libro, Salir del duelo, de Anne Ancelin Shutzenberger & Evelyne Bissone Jeufroy